El mundo de la costura alberga miles de métodos y técnicas para realizar todo tipo de proyectos, pero hoy queremos contarte el método patchwork. Es un procedimiento que requiere una previa instrucción, por eso, vamos a contarte todo lo que debes saber para iniciarte en el patchwork.
¿Conocías el método patchwork? pues quédate que empezamos.
El patchwork y sus técnicas
El patchwork es un método de costura que consiste en unir telas o retales de diferentes colores y tamaños utilizando diferentes técnicas para llegar a formar distintos motivos y objetos para crear una prenda nueva.
Este método de costura se remonta a miles de años atrás, ya que incluso los egipcios lo usaban en sus ropas y paredes. Las primeras piezas de patchwork se remontan a la edad media, en las que encontramos diferentes técnicas dependiendo del país o zona donde hacían este método.
Los años de bonanza del patchwork fueron durante la Gran Depresión, esto fue a raíz de la falta de dinero, lo que causó que no se pudiera comprar ropa o telas completas, y entonces utilizaban retales para crear su ropa de vestir o elementos de hogar.
Técnicas más usadas
Existen muchos tipos de técnicas de patchwork, ya que esta es una fuente de creatividad costuril. Os vamos a comentar las más populares y sencillas para iniciarte en este mundo.
- Piecing o pieceo es la técnica más sencilla del patchwork. Es la más recomendable para empezar este método de costura. Consiste en cortar piezas geométricas en papel para utilizarlas como patrones, para luego coger telas o prendas usadas y coserlas a los patrones hechos en papel. Todos estos patrones individuales se juntan en una única pieza formando un diseño final.
- Jardín de la abuela es una técnica muy vistosa y preferida por muchas personas que quieren iniciarse en el patchwork. Consiste en crear piezas de tela con forma hexagonal que usan para superponer sobre otra pieza de tejido. El truco de esta técnica es la combinación de colores y texturas en los diferentes hexágonos. Se utiliza mucho para adornar bolsos u otros complementos. Si quieres ser más precioso con las formas existen plantillas hexagonales que te facilitaran el trabajo.
Imagen: Freepik
- Plato de dresdén es un procedimiento que requiere mucha más elaboración que otros. Consiste en coser todos los trozos de tela que vayamos a utilizar uno al lado del otro en forma de círculo. La presentación de este método se asimila a la de un plato, de ahí que reciba ese nombre. Muchas personas colocan un aplique en el centro de éste a modo de decoración. Un truco final que te damos es que todos los trozos de tela que utilices tienen que ser del mismo tamaño para que no sobresalgan unos de otros.
- Log Cabin es uno de lo métodos más clásicos y con mayor tradición de esta técnica. Se traduce como “cabaña de troncos”. Su elaboración consiste en comenzar con un cuadrado central de tela al que se le van añadiendo tiras de tela formando una especie de cabaña. Es ideal para utilizar retales que no puedes utilizar en otros métodos de costura.
- Aplicación o aplique es una de las técnicas más creativas. Consiste en plasmar en la tela un dibujo a tu preferencia y recortar piezas de tela siguiendo el patrón de la figura elegida hasta rellenarla por completo con los diferentes retales, puedes unirlos con pegamento especial para patchwork o termoadhesivo.
Es importante que si la tela que vas a utilizar no tiene una base o soporte estable le adhieras una entretela apropiada para patchwork, al igual que utilices agujas del tamaño que necesites y materiales propios para esta labor.
Diferencias entre patchwork y quilting
Estos dos términos suelen utilizarse con el mismo significado, pero la realidad es muy distinta.
Como te comentaba, el patchwork es un método de costura que consiste en unir telas o retales de diferentes colores y tamaños utilizando diferentes técnicas, mientras que el quilting es el acolchado.
Un ejemplo muy claro sería la elaboración de una colcha. Por un lado, con el método patchwork realizamos la unión de las telas y le damos la forma y tamaño deseado. Tras esto, le damos forma, suavidad y comodidad con un acolchado como la guata y cerramos la primera capa de patchwork con la guata y con una tercera tela del tamaño que hayamos elegido. Esta unión que hacemos con las tres piezas se llama quilting o acolchado.
Por este motivo, podemos decir que el quilting es parte del patchwork, pero no son lo mismo.
Imagen: Freepik
Ahora que conoces este método de costura, ¿te atreves a realizarlo en casa?
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